Semana Santa en el País Vasco: tradiciones con alma

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Explorar los secretos mejor guardados de la Semana Santa en Euskadi es sumergirse en una tradición que combina historia, emoción y devoción popular. A través del incienso, las túnicas, los silencios y las representaciones, muchas localidades vascas reviven el drama de la Pasión de Cristo con una intensidad que sobrecoge y conecta generaciones.

En Grupo La Vasca, nos encanta descubrir y compartir las raíces que dan sabor y sentido a nuestra cultura. Y estas fechas son una ocasión perfecta para hacerlo. Te llevamos de viaje por algunas de las celebraciones más auténticas y conmovedoras de la Semana Santa vasca.

Balmaseda: un Vía Crucis viviente que emociona

En esta histórica villa de Bizkaia, todo el pueblo se transforma durante la Semana Santa. El Vía Crucis Viviente de Balmaseda es uno de los más espectaculares del Estado. Más de 650 vecinos y vecinas participan en una representación que ensayan durante meses y que cada año atrae a más de 50.000 espectadores.

La escenificación comienza el Jueves Santo a las 21:30 h, con la Última Cena, el Huerto de los Olivos y el Prendimiento de Jesús. El Viernes Santo, desde primera hora de la mañana, el sonido de los tambores anuncia el juicio ante Pilatos, el ahorcamiento de Judas y el camino hacia el Calvario.

Ese mismo día, se celebran tres procesiones que resumen el espíritu de Balmaseda: la Procesión de los Pasos, la solemne Procesión del Entierro, y la sobrecogedora Procesión del Silencio, que recorre la noche hasta el cementerio.

Segura (Gipuzkoa): una llave, una vela, y la Pasión

En esta villa medieval guipuzcoana, la Semana Santa se vive con una mezcla de solemnidad y belleza ritual. Destaca la peculiar ceremonia del Apresamiento del Cáliz, en la que se encierra simbólicamente el cáliz tras la misa del Jueves Santo y se entrega la llave al alcalde. Vecinos voluntarios se turnan durante toda la noche para velarlo.

El Viernes Santo culmina con la Bajada de la Cruz y una procesión que revive la tradición más viva del lugar, acompañada por txistularis, penitentes, soldados romanos y cofrades vestidos de negro.

Laguardia (Álava): El Desenclave y los Versos de la Pasión

En la Rioja Alavesa, entre viñedos y murallas, Laguardia vive una de las tradiciones más singulares: el Desenclave de Cristo. El Viernes Santo, miembros de la cofradía Hermanos de la Escuela de Cristo bajan cuidadosamente el cuerpo articulado de Jesús de la cruz y lo depositan en un sepulcro.

Ese mismo día, al anochecer, se entonan los antiguos Versos del Viernes Santo por las calles del pueblo, manteniendo viva una liturgia oral que emociona.

Samaniego y Salinas de Añana: la purificación del Judas

En estas localidades alavesas, la figura de Judas Iscariote cobra protagonismo en actos populares que mezclan teatro, fuego y tradición. En Samaniego se celebra la Quema del Judas, con música, danzas, versos y la quema simbólica del traidor en una explosión festiva.

En Salinas de Añana, el llamado Paseo del Judas escenifica su captura, juicio y condena, en una teatralización callejera cargada de significado.

Vivir la tradición y saborear la esencia

La Semana Santa en el País Vasco es mucho más que una festividad religiosa: es identidad, cultura viva y emoción compartida. En Grupo La Vasca nos sentimos orgullosos de nuestras raíces, y por eso celebramos estas fechas con el mismo respeto y pasión que ponemos en cada plato.

Ya sea antes o después de vivir alguna de estas tradiciones, La Vasca, El Vasco y Sukalde te esperan con sabores que también cuentan historias. Porque cada rincón de nuestra tierra guarda una esencia que merece ser celebrada en la mesa.